A un año del accidente de Emiliano Sala, el dolor fue y sigue siendo doble. Por su ausencia y por no haberlo visto en su debido momento. Escribe Santiago Núñez.

No sé si sonreíste, pero ojalá que sí. Sólo nos sale pedirte perdón, pero no porque tengamos algo que ver, sino porque nos dimos cuenta tarde que eras uno de los nuestros, Canario. No lo sabíamos, lo escuchamos cuando no hubo tiempo para disfrutarte. Y cuando pasa esto, es como si uno quisiera saber “qué hubiera pasado si”, pero ya no da para más la cosa.

¿Viste que te dijeron muchas veces, seguro de pibe y de grande también, que las cosas se valoran más cuando uno no las tiene? Nos sentimos unos giles, porque vos sí lo valoraste todo. No lo pudimos ver, no lo supimos. Si fuera por nosotros, aunque esto no ahorre las disculpas, nos podríamos haber dado cuenta.

Pero no podemos ver todo el futbol del mundo como quisiéramos y justo el de Francia no lo vimos. Nos llega que hay un equipo que gana siempre que es ese mismo que tiene al 9 que nos pegó un baile de novela en el Mundial de Rusia. Ese al que vos le peleabas el mote de goleador. Je. ¿Te imaginás un título que diga “el único argentino que le peleó a Mbapeé en 2018”? Ya sé que ya no te podés imaginar nada, Canario, pero pensalo, hubieras roto las tapas de varios diarios deportivos.

No sé si lo sabías, obvio que tarde, pero que todos los diarios publicaron cosas sobre vos. Sobre como la peleaste, sobre Progreso, sobre el Proyecto Crecer, sobre que quedaste en la historia de un equipo de la segunda División de Francia, sobre el Nantes, sobre que te gustaba leer novelas policiales, sobre tu perra Nala en la puerta de tu casa.

Te conocieron, Canario, acá y en todo el mundo. Diste la vuelta al planeta. Messi y Maradona hablaron de vos. Brian, en México, te mandó fuerza cuando la metió en el torneo. En River y en Boca te mandaron apoyo. Tu Rojo querido te saludó para toda la eternidad. El deté del Nantes lloró por vos Canario, y los gringos de Cardiff te pusieron en la lista para el último partido. Los Canarios y los Pájaros Azules, como les dicen a ambos equipos, te hicieron banderas, mostraron imágenes, lloraron. El último gol del Nantes se hizo en el minuto 9 mientras vos seguías en la pantalla gigante del estadio. Los dirigentes dicen que van a retirar tu casaca, Canario. Sos Historia, pero de la buena.

Nunca te dijeron “Canario” en tu vida, ¿no? Perdón, es que llamarte por tu nombre nos da vergüenza. Porque no la vimos Canario, porque nos dimos cuenta tarde que eras uno de los nuestros, que le gusta el futbol por el futbol, que si tiene 19 años y tiene la más mínima chance de cumplir el sueño de su vida y empezar a los 20 en la tercera división de Francia lo va a hacer. Porque te la bancaste, sin prensa, sin representante. Porque amás la pelota por sobre cualquiera cosa.

Sí, escuchaste bien. Dije “amas”, no “amabas”. Estás ahí Canario. ¿Sabés que hoy nos preguntamos qué habría pasado si el 21 de enero ese de mierda no hubiese existido? Pero no sirve. Por lo pronto vamos a hacer dos cosas. Primero, dejar algunos elementos de lado y, luego, focalizar en otras cosas.

Nos vamos a olvidar del choque y del barco, perdón pero no podemos. No existe manera de escribir sobre la línea delgada de lo que no tenía manera de pasar y pasó. Perdón.

Vamos a acordarnos, y por eso gracias, de vos con una camiseta amarilla, sonriendo, gritando goles, persiguiendo a Mbapee. Vamos a hacer que te conocimos de toda la vida. Que sabemos lo de Progreso y el Proyecto Crecer. Que la rompés en Francia, que es enero de 2019 y jugas tu último partido porque te vas a jugar, porque te lo mereces, a la Premier League. Incluso andás bárbaro y algunos programas de televisión dicen que sos tenido en cuenta para ir a jugar a Brasil por la Copa América. Vamos a detener ese momento y lo vamos a intentar eternizar. Otra cosa no podemos hacer Emiliano. Es la única manera que encontramos para despedirte. Que descanses en paz.

Santiago Núñez

1 Comments

Deja un comentario