Agenda 2020 de la CELAC: un instrumento para el progreso regional

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Cuando en enero del 2015, durante la III Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) realizada en Costa Rica, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, recibió de manos del mandatario, Luis Gui­llermo Solís, la presidencia pro témpore (PPT) del organismo, una nueva ruta se presentó para el grupo.

El dignatario ecuatoriano expuso a la comunidad la propuesta de trabajo para el periodo en que su país estaría al frente del mecanismo de concertación política.

Con vistas a fortalecer la integración latinoamericana se presentó Agenda 2020, un documento que propone un horizonte programático de cinco años para la Celac y que no se limita a la acción del país que ostente la presidencia pro témpore.

Un año después y a las puertas de la IV Cumbre de la Celac, que iniciará el próximo día 24 en Quito, aún persisten los principales retos para el cumplimiento total de ese plan que deberá ser aprobado por los jefes de Estado y de Gobierno de las 33 naciones que componen el organismo.

La presidencia pro témpore ecuatoriana, autora del documento inicial, ha expresado en constantes ocasiones la necesidad de acelerar los trabajos en vista a presentar objetivos concretos.

El presidente Rafael Correa destacó que esta propuesta “puede ser un instrumento para impulsar con mayor fuerza la agenda post 2015, adoptada durante la Cum­bre de Desarrollo Sostenible” en Naciones Unidas.

Es por ello que entre las prioridades de la Agenda 2020 de la Celac se encuentran la reducción de la pobreza extrema y la desigualdad, el desarrollo de la ciencia, tecnología e innovación, la lucha contra el cambio climático, el establecimiento de estructura y conectividad, y el financiamiento para el desarrollo de la región.

La construcción de nuevas oportunidades y el progreso para América Latina y Caribe deben estar en el centro de los debates que realicen los 33 países del bloque, con un discurso desde la unidad y que diseñe estrategias concretas para resolver los problemas del continente. En este sentido la Agenda 2020 ofrece un marco, que respetando las diferentes realidades nacionales, contribuye a mayores beneficios regionales.

Desde la presidencia pro témpore se ha recordado también la particularidad de la Agenda 2020 como un “documento vivo”, que debe ser alimentado por los aportes de cada uno de los países representados en la Celac.

La propuesta de Ecuador no solo aspira a continuar con el cumplimiento la agenda post 2015 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pretende además establecer una hoja de ruta y una metodología para abordar las metas diversas que preocupan a nuestros pueblos.

El mayor desafío para el cumplimiento de esta agenda radica en las labores para la erradicación de la pobreza, pues casi 68 millones de latinoamericanos y caribeños viven en esta situación.

Los ejes de la Agenda 2020 son complementarios entre sí. La presidencia ecuatoriana tiene muy clara que para eliminar la pobreza y las desigualdades, por ejemplo, se hace necesario incrementar la inversión en educación, ciencia y tecnología. Estas estrategias concretas están además en función de alcanzar la integración y los beneficios mutuos en temas de cooperación.

También prevé fortalecer las relaciones con otras re­giones como China y la Unión Europea, así como explorar la posibilidad de hacerlo con otros países como Ru­sia, India, Sudcorea, Japón y Turquía.

La concertación en torno a estos puntos permite a la Celac, como la tercera economía más grande del mundo, ubicar sus objetivos de desarrollo regional dentro de la agenda de los grandes organismos internacionales. Pero esto no será suficiente sin la integración, solo mediante el funcionamiento como bloque será posible posicionar los temas esenciales para los pueblos.

En Agenda 2020 se recogen compromisos que po­drán ser asumidos únicamente como región. La historia ha demostrado que enfrentar estos retos de manera individual tiene grandes posibilidades de fracasar. Esta es la época de la integración de América Latina y el Caribe, solo así las satisfacciones serán compartidas.

 

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