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Una jarana, una canasta azul con una estrella rosada colgando del asa y una canción que atrae innumerables miradas y uno que otro dólar. Marisoul tiene el reto de ponerle color con su música a la mañana nublada que se ve sobre la Placita Olvera, una prueba que supera sin problemas.

No es la primera vez que lo hace ni la segunda, ni la décima. Marisoul, vocalista de la banda La Santa Cecilia, viene cantando en la calle desde que tenía 10 años de edad y hoy con 20 años más, lo hace con un grupo de músicos establecido, con importantes canciones a la venta por Internet y con un productor musical que tiene Grammys para regalar, mientras Marisoul vuelve a sus raíces cada vez que puede.

“Tengo muchos recuerdos de la Placita”, comenta Marisoul Hernández durante un recorrido realizado con HOY a lo largo de la Placita Olvera, donde prácticamente nació, creció y sigue visitando.

Antes de iniciar el paseo, su papá, Lalo Hernández, le recuerda a su hija cómo empezó todo: . “Yo trabajaba aquí, en el quiosco, y la mamá de Marisoul cantaba ahí nomás”, dice Don Lalo señalando la pared ubicada frente a su puesto de artículos típicos variados, el que fundó su padre a fines los años 50. “Ella venía acompañada de un tecladista. Bien bonito cantaba”, recuerda.

“Así es”, asiente Marisoul, “ella me enseñó a cantar”.

Y vaya que lo hizo. Su voz tiene la capacidad de encrespar la piel y ello, combinado con la letra y música de su grupo, están avanzando a pasos que merecen atención.

La Santa Cecilia, con Marisoul de vocalista, Gloria Estrada en la guitarra, José Carlos en el acordeón, Alex Bendana en el bajo, Miguel Ramírez en la percusión y Hugo Vargas en la batería, se ha convertido en un grupo con presencia no sólo en Los Ángeles sino también en otras ciudades importantes de California, como Bakersfield, San José, Santa Cruz, San Diego y San Francisco. Además de haber agitado auditorios en Chicago, Wisconsin, Austin y hasta en el mismo México.

Actualmente la banda se encuentra de gira por la Costa Oeste promocionando su nuevo tema “Chicle” de “Noche y Citas con Chile”, una edición especial digital de su disco original “Noche y Citas” que incluye tres temas nuevos. Nada extraño sería que la crítica especializada vuelva a ponerles varias estrellas, como lo viene haciendo desde el 2007, cuando nació el grupo.

Marisoul descubre su voz

Para Marisoul –nombre artístico sacado de su primera cuenta de correo electrónico-ha sido un camino duro y lo sigue siendo. Los recuerdos salen con facilidad mientras sigue caminando frente a los quioscos y cuando pasa frente a uno que vende golosinas, ahí se detiene y dice emocionada: “Siempre me gustó la música. Mi papá tocaba guitarra en la casa y cantaba, muy feo [ríe], pero con mucho sentimiento y me enseñaba canciones. A mí me daba pena porque era tímida, pero él me animaba, especialmente los fines de semana, aquí, con los mariachis. Mi papá me decía que les pidiera cantar con ellos y cuando me dieron mi primer dólar pensé ‘Órale, si canto aquí, me dan dinero y me lo voy a poder gastar en trompos, juguetes, dulces… ‘ Tendría unos 10 años”, dice sonriendo.

Pero las ganas de cantar en serio llegaron cuando se fue a vivir a Morelos, México, con su madre. Tenía 14 años y siempre veía a un grupo que tocaba en las fiestas. Ella iba a las canchas de basquet para verlos ensayar. Un día se armó de valor y les pidió cantar una cancion con ellos. Le dieron un tema de Selena para cantarlo durante una fiesta y le salió tan bien que la invitaron una segunda vez. Pero Marisoul no contaba con un detalle. “Mi mamá me dijo que le pidiera permiso a mi padrastro y él no me dejó ir. ‘¿Qué van a pensar, que eres una cualquiera?’, me dijo. Pero algo dentro de mí me dijo ‘No estoy haciendo nada malo, ¿Por qué no puedo cantar?’. Así que me bañé y le dije ‘Me voy’. Él me advirtió ‘Si te vas, no vuelves’, pero igual me fui, canté y de regreso encontré una quemazón en mi casa. Mi mamá quemaba todo; cortinas, cobijas, trastes… quemó todo lo que habíamos hecho en esa vida en México con su marido. Mi mamá sale, me da una bolsita y me dice ‘¿Quieres cantar? Nos vamos de aquí’ Y nos fuimos para siempre”, dice Marisoul con la voz entrecortada.

“Me trae sentimiento recordarlo porque yo sentí que, a lo mejor, ella se vio en mí sus deseos de cantar… siento que la quemazón de esa noche fue el momento en que dije ‘Yo quiero cantar’. Agarramos un taxi, nos fuimos al aeropuerto y regresamos a Los Ángeles”, agrega muy emocionada. “Se lo agradezco un montón por haber hecho eso”.

Camino a la fama

Lo que sigue es una historia que Marisoul y sus compañeros de canto aún relatan con humilde emoción. Miguel, quien también se unió al paseo con HOY por la Olvera, cuenta que un día, a mediados de los 90, paseaba por la Placita y quedó impresionado con la voz de una Marisoul de 19 años de edad. Casualmente, el grupo con el que entonces tocaba Miguel buscaba una talentosa vocalista. Fue así que ambos comenzaron una relación musical.

Al tiempo los dos dejaron el grupo, pasaron varios años, cada uno se distrajo con relaciones y tormentos sentimentales y en el 2007 se reencontraron. Fue entonces que poco a poco comenzó a crecer la familia de La Santa Cecilia, nombrada en honor al santo de los músicos. El tercero en llegar al encuentro fue José Carlos, a quien Marisoul ya conocía de antes pues también tocaba en la Placita. Luego llegó Gloria y ella le pasó la voz a sus compañeros de escuela Alex y Hugo.

Su música, una interesante y original fusión de baladas mexicanas tradicionales, jazz, rumba, banda, cumbia, bossa nova, tango, rock y más, ha salido en series de televisión, como “Entourage” y “Weeds” (ganadora de un Emmy), en películas como “Dish” y suena en la radio KPFK.

Impresionado por su sonido, el productor argentino Sebastián Krys, cuyos créditos incluyen cuatro Grammys Americanos, ocho Grammys Latinos y el haber trabajado con estrellas como Carlos Vives, Luis Fonsi, Rabanes, Kinky, Ricky Martin y Shakira, fichó a La Santa Cecilia el pasado noviembre bajo su propio sello disquero Rebeleon Entertainment.

Hoy este sexteto de músicos con ADN inmigrante, va en ascenso, sin embargo, pese a que cada vez tienen más contratos, conciertos y respaldo, aún deben repartir su tiempo tocando en otras bandas, dando clases de música e, incluso, regresando a sus orígenes: la calle.

Pero Marisoul ya no tiene pena, al contrario. Desde que agarró confianza, desde que cambió la vestimenta negra de sus años de adolescente punk por las faldas, mallas, zapatos y camisetas color fosforescente, ella brilla más que nunca.

“¿Que dónde me veo?”, pregunta Marisoul, quien compone la mayoría de los temas del grupo. “Viviendo una vida musical, sacando las mejores canciones, viviendo de la música”.

“Sacrificamos todo por esto, entonces esperemos que se nos regrese”, agrega Miguel mientras Marisoul asiente explicando que, actualmente, ella misma está viendo afectado su matrimonio de 4 años, precisamente, por el momento profesional que vive junto a la banda.

“Quiero viajar por el mundo, conocer, aprender de otras culturas, reciclar ese aprendizaje, ponerlo en el papel, compartirlo y transmitirlo”, agrega Marisoul.

PROXIMOS CONCIERTOS EN LOS ANGELES

LA SANTA CECILIA DE GIRA

Junio 18

Pasadena Music Festival, Pasadena

Junio 19

Dodgers Stadium, Los Ángeles

Julio 21

The Mint, Los Ángeles

Julio 24

Plaza de la Raza (Target series), Los Ángeles.

Agosto 27

Plaza California, Los Ángeles.