Cambio de Propósitos MIchel Domit
- En nuestra escala de valores qué es prioritario
- Qué virtudes deseamos construir y qué defectos eliminar
QUÉ PROPÓSITOS DE AÑO NUEVO HEMOS DEJADO FUERA DE NUESTROS PLANES DE VIDA
México, D.F a 27 de enero de 2015.- La mayoría de las personas nos planteamos propósito y metas al inicio de año y cada una de ellas tiene una prioridad en nuestra escala de valores, pero qué pasaría si supiéramos que tenemos pocos días de vida, quizá cambiaríamos nuestra forma de rutina diaria, esta es una reflexión que el autor del Best Seller, Ser, Hacer y Tener, Michel Domit plantea en sus seminarios y talleres, con el propósito de retomar los valores que tal vez hemos dejado olvidados.
Para él la Vida es un Sueño, es tan efímera que debemos cultivar lo que realmente nos será de utilidad el día que dejemos de existir, como el amor, la paz, la felicidad; valores que quizá hemos perdido porque no forman parte de nuestra escala de valores por mantenernos tan inmersos en nuestro día a día para lograr un mejor puesto laboral, tener el carro, la casa, el poder que siempre hemos soñado.
“No podemos cambiar la duración de nuestra existencia en este mundo, pero sí podemos tomar decisiones sobre muchas áreas de nuestra vida”, menciona Michel Domit, quien en sus dinámicas dentro de los seminarios que imparte, maneja el autocuestionamiento como herramienta de apoyo para ayudar a descifrar a los asistentes quiénes son y cuál es su papel en esta vida.
El autor de Ser, Hacer y Tener argumenta que es fundamental tener un plan de vida que comience por definir quién queremos ser, es decir, qué virtudes queremos construir y qué defectos queremos eliminar y así cambiar el curso de nuestra vida. “Gran parte de la problemática actual del ser humano está fundamentada en una errónea escala de valores, donde el TENER ocupa la posición privilegiada y donde siempre se sentirá insatisfecho”, expresó Michel Domit.
Comenta que a la hora de morir nada de lo que poseemos nos llevamos consigo, lo único que realmente nos pertenece es nuestro SER, al que hay que alimentar con virtudes y cualidades, las cuales hay que trabajar para fortalecerlas, desarrollarlas y perfeccionarlas. “Estos seminarios que realizo periódicamente están diseñados para aquellas personas que realmente estén abiertas a la posibilidad de un cambio radical en su vida y, sobre todo, estén dispuestas a cuestionarse con sinceridad y desde su raíz los valores morales y espirituales que actualmente norman su vida”, finalizó.
