Entre otros factores negativos la agencia destacó la inestabilidad política, que impide la aplicación de estrategias a largo plazo. Tras el anunciado cambio de primer ministro, Japón tendrá su séptimo titular desde el año 2006. El propio Naoto Kan reconoció que dimite por su gestión inadecuada de la crisis nuclear.
El pasado 31 de mayo Moody’s empezó a revisar la calificación de la deuda de riesgo japonesa, a la baja, ante las dificultades del Gobierno para establecer y alcanzar un objetivo «creíble» de reducción del déficit público.
Además, en febrero la agencia rebajó la perspectiva de la deuda soberana de Japón de «estable» a «negativa» (Aa2) y advirtió que, sin una estrategia efectiva, la deuda nipona aumentaría notablemente debido a los altos costes económicos y fiscales del terremoto del 11 de marzo, los cuales resultaron ser mucho mayores de lo esperado inicialmente.
FUENTE: RT.ACTUALIDAD