Transcurrido el mes de agosto en el que me he impuesto un descanso en la llevanza del blog (salvo una única excepción), me pongo de nuevo frente al teclado para escribir sobre los temas en los que centro mi vida académica y profesional: derecho mercantil, abogacía, docencia e innovación y un poco de Derecho Deportivo (todos tenemos vicios). Lo hago con fuerzas e ilusiones renovadas ante el comienzo de un nuevo curso jurídico que para mí trae muchos retos y proyectos tanto en lo académico como en lo profesional, de los que os iré dando cuenta. A lo anterior se une la especial motivación y satisfacción personal de cumplir el próximo día 3 de septiembre un año de blog, así como la responsabilidad de cumplir con las expectativas de los que -cada vez más- me acompañáis casi a diario. En todo caso, la idea del blog no deja de ser la fundacional: participar en la blogosfera jurídica -cada vez de una mayor calidad- con un instrumento de divulgación académica y profesional, sin mayores pretensiones que las de poder alimentar modestamente el debate y aprender de todos los que os apetezca interactuar.
Por lo demás, alguna pequeña novedad estética y funcional acompaña al blog (y otras que iré incorporando progresivamente de lo mucho que aprendo siguiendo a otros) en el comienzo de este nuevo curso jurídico. Espero que os guste. Un abrazo.
