Qué suerte tenemos las mujeres. Hoy es «nuestro Día Internacional». Nos regalan un día al año, síntoma inequívoco de que nos roban los 364 días restantes. En un país donde una mujer gana una media de 5.000 euros menos al año que un hombre, ocupando su mismo puesto (y rindiendo más) En un país donde estar embarazada te cuesta ese puesto de ese trabajo peor remunerado, donde el acceso al mercado laboral es un imposible, donde aun se habla de ayudar en las tareas domésticas en lugar de compartir, donde la conciliación es una utopía. Donde aun queda mucho camino por recorrer… Un día al año de reivindicaciones que, a la vista de los hechos, no valen para gran cosa.

La idea surgió en plena revolución industrial, corría el  S XIX, en pleno auge del movimiento obrero,  retomando una lucha ya emprendida por Lisístrata, en la Antigua Grecia, que propuso la huelga sexual para poner fin a la guerra y que, posteriormente, se reflejó en la Revolución francesa, con aquellas sufragistas que pedían libertad, igualdad y fraternidad, marchando hacia Versalles y pidiendo el voto femenino. Recordemos que, lo que supuestamente dio pie a esta celebración, fue la muerte de 14o mujeres, inmigrantes, en una fábrica de Nueva York. Murieron calcinadas a causa de unas bombas incendiarias que lanzaron durante el encierro de las mismas. Protestaban por sus bajos salarios… Ha cambiado algo? Sospecho que muy poco.

Aborrezco este día. Es la versión política del San Valentín de El Corte Ingles. Políticos de todo signo y condición salen a la palestra a hacer gala de su retórica, oratoria (eso no muchos) y demagogia, a regalarnos los oídos, a promover iniciativas que, en el mejor de los casos, darán un par de titulares para un periódico. Papel mojado.

Celebran este día las mujeres que siguen sufriendo la ablación del clítoris, las que mueren lapidadas por cometer adulterio? (normalmente, ésta últimas son casadas muy jóvenes, con hombres que podrían ser sus padres, y en contra de su voluntad. La posibilidad de enamorarse y de ser felices no está contemplada para ellas) Lo celebran las que viven bajo un burka, las que sufren maltrato? (resolver la violencia de género es un asunto de todos, señores)  Las que mueren simplemente por ser mujeres, o las que no llegan a nacer por esa misma causa?

Hoy las mujeres abrimos todos los informativos. Mañana, desgraciadamente, todo seguirá igual. No se pueden borrar de un plumazo siglos de sometimiento, de marginación social… Siempre he creído que, desde el principio de los tiempos, el hombre nos supo más inteligentes y capaces, y nos relegó a un segundo plano, para que no fueramos un estorbo en sus planes para «construir un mundo mejor» Atavismo que aun sigue vigente, y que costará erradicar. Se nos exige más solo por el hecho de ser mujeres, tenemos que hacer doble esfuerzo por demostrar nuestra valía.

La ONU nos regala una Comisión de vigilancia para la Equidad, presidida por Michel Bachelet. La igualdad de género es un asunto que debe ser abordado como una problemática social importante y en la que deben implicarse todos los gobiernos. No solo un día, sino un día tras otro. Hay que remangarse, y quitar el fango, pero tenemos que hacerlo todos. Hombres y mujeres. Jóvenes y mayores… Y empezar desde casa, educando en igualdad. Hay niños muy pequeños que están reproduciendo esquemas machistas, y ese el gérmen que hay que erradicar.

No pierdo la esperanza. Llegará la equidad, pero no creo que ni nosotras, ni nuestras hijas lo veamos, aun queda mucho camino por recorrer. Y un día al año no es suficiente, la desigualdad entre hombres y mujeres es absoluta en todos los terrenos. Queremos las mismas oportunidades, y hacer uso o no de ellas, ya es cosa nuestra

Sí, definitivamente, aborrezco este día.  No quiero superar al hombre. Solo quiero ser mujer. Cada día más mujer